El timeline no nace, se hace

Imagen cortesía de http://techlationships.com/

Comienzo reiterando lo dicho en post anteriores, no soy experto y mucho menos gurú –cosa que no seré jamás- de las redes sociales, sólo soy un usuario que comparte su experiencia con sus amigos invisibles.

El caso

¿Alguna vez te has sentido insatisfecho con tu timeline en las redes sociales? Entras a twitter buscando algo y lo que consigues es disgusto, apatía, monotonía o banalidad. Te vas a Facebook y allí te tropiezas con un montón de jueguitos infantiles, imágenes inútiles en las que te han etiquetado, solicitudes de “amigos” que jamás has visto y un aburrido etcétera. Pues la razón de todo eso eres tu mismo. Cada quien es el constructor de su timeline.

Desde que das el primer follow ese usuario se convierte en una especie de roommate que estará cuando quieras y cuando no. Así se va sumando cada uno. ¡Imagina que sigues a 500 usuarios que hablan todos siempre de lo mismo! Hay miles de usuarios monotemáticos, gente que sólo habla de política, deportes, moda, o que sólo saben hacer RT. Si ese es tu timeline pues será aburridísimo cuando andes buscando información o algún tema particular.

Lo mismo sucede con Facebook y los “amigos”, sin profundizar en el tema de la seguridad que merece un apartado especial. Facebook es mucho más revelador pero de cualquier manera tu sigues siendo dueño de lo que callas y esclavo de lo que publicas. Si vas a aceptar a todos los adolescentes que conoces, pues prepárate para tener doscientas notificaciones diarias, si vas a aceptar a toda tu familia entonces vendrán las fotos vergonzosas de cuando eras niñ@ y así con cada círculo de amistades. ¿No te gusta lo que ves en Facebook? Revisa tus amistades.

Mi método

En cada caso tengo unos procedimientos que me han dado resultado. En el caso de twitter me convertí en el mejor amigo de las listas. Cuando creas listas no necesitas “seguir” para leer. Sólo incluyes a los usuarios que te interesan por tema en una lista, la cual identificas con el nombre de tu preferencia y allí los tendrás para leerlo cada vez que accedas a esa lista en particular. Por ejemplo, si te gusta seguir información relacionada con tecnología, pero no quieres tener a cientos de geek’s enseñándote sus últimos juguetes electrónicos durante todo el día, entonces crea una lista que puedes llamar “Tech” e incluyes a todos los que informen sobre ese tema. Los leerás cada vez que quieras, agrupados y sin cargarte tu timeline.

Por otro lado, me importa un comino el #siguemeytesigo, #follow1x1, #followback y todas sus variantes. Cuando sigo a un usuario es porque leí su bio, vi su avatar y leí sus tweets más recientes. Así me aseguro que estoy siguiendo a alguien que me interesa leer. Si sigo usuarios que no me aportan nada pues estaré perdiendo mi tiempo cada vez que ingrese a twitter, si sigo a usuarios que colocan información de mi interés, que hablan sobre temas que me enganchan o me dan nota entonces será un placer revisar mi timeline. Ahora, si un usuario escribe cosas que me ofenden o me disgustan lo dejo de seguir sin apasionamientos, sin avisarle a nadie y sin ofenderlo. Nadie me obligó a seguirlo y nadie me obliga a leerlo. En las redes sociales existe la e-ducación. Los buenos modales siempre son bienvenidos, aunque te muevas en el anonimato.

Con Facebook me volví cuidadoso. Llegué a tener a muchas personas que no conocía y me empezó a preocupar la interacción y la exposición de información personal, por lo tanto reduje el número de amigos a, únicamente, los que conozco personalmente. El resultado inmediato fue extraordinario. Al mismo tiempo abrí un fan page en el que recibo a todo el mundo, no publico información personal sensible, me permite postear temas variados y me da un feedback fabuloso.

El timeline no nace, se hace. Constrúyelo a tu medida y disfrutarás con mayores beneficios de tu tiempo en las redes sociales.

Germán Alberto Abreu.-